Miguel Pacheco Loins
Antofagasta, Agosto de 2011
Mirada que con fuego registras
la huella de ninfa misteriosa
envidiada por las flores del bosque
que no lucen en tu mágica presencia.
De paisajes te modelaron los dioses,
tu imagen esmerados diseñaron
con amaneceres fundieron las esencias
embriagadoras para el hombre natural.
Suaves pétalos son tus labios
que invitan el néctar de la vida,
piel de seda que te envuelve
experiencia seductora maravilla.
Si la mágica ninfa se posara
con sus dulces pétalos en mis labios
si la piel me envolviera con su seda
viviría por siempre extasiado.