Miguel Pacheco Loins
Antofagasta, Septiembre de 2011
Navega en las estelas de un horizonte
que se aleja más de los sueños
y a los puertos te aproximas tan lento
como la brisa permite la fuga.
Rumbos imposibles sólo quedan
la deriva amenaza las viejas rutas
las mareas confrontan el norte
y en el cansancio de olas renuncia.
Nocturnos cielos, aires transparentes,
acompañan la cotidiana travesía vital,
celestes guías describen direcciones
te entregas desarmado a la indecisión.
La aventura aproxima su término
impredecible el desenlace se torna
oceánicos seres pacientes esperan
entre la tierra y el cielo tu vano fin.